La vendimia lanzaroteña 2025 finaliza con la recogida de 800.000 kilos de uva
La campaña de vendimia en Lanzarote cerró con un volumen de algo más de 800.000 kilos de uva recolectada, una cifra que supera ligeramente las previsiones más pesimistas del sector y aleja algunos fantasmas de aquel año 2016, la cosecha más escasas en décadas.
Según confirman desde el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Vinos de Lanzarote, la cifra final asciende a 800.000 kilos. Esta cantidad, aunque claramente limitada, supera lo inicialmente estimado por los productores y técnicos.
Diversos medios hablaban de una cosecha que podría quedarse en torno a los 600.000 kilos, mientras que estimaciones oficiales previas anticipaban un cierre cercano a los 750.000 kilos. Finalmente, el dato real de 800.000 kilos representa un respiro frente a esos malos augurios.
Este volumen, si bien no se acerca a los picos históricos -como los 3,3 millones de kilos recogidos en 2023 o los 1,3 millones de 2024- sí supone una ligera mejoría respecto a una de las peores añadas contemporáneas: 2016. Aquel año se obtuvo sólo 700 000 kilos de uva, la producción más baja de las últimas décadas
La comparación con 2016 muestra que, aunque la campaña actual ha sido complicada, no ha sido «tan catastrófica» como temían, entre otros motivos porque las bodegas han ampliado en un par de días el plazo para recibir la uva.
Más allá del tonelaje, desde el Consejo Regulador se insiste en que la calidad de la uva ha sido alta. A pesar de la brotación irregular y las inclemencias climáticas, la uva ha llegado sana a las bodegas, ofreciendo gran concentración y expresión, seña de identidad del vino lanzaroteño.