Patrimonio denuncia a la grafitera Vanessa Alice por su pintada en una ruina

El Servicio de Patrimonio del Cabildo de Lanzarote, un área infradotada desde hace años y que mantiene pendiente en agenda un sinfín de informes preceptivos para el desarrollo de iniciativas urbanas en Lanzarote, ha incluido entre sus tareas del mes de enero de 2024 levantar un acta de denuncia sobre la realización de una pintada en una vivienda rural en ruinas que pertenecía al siglo XVIII. El inmueble está situado en una parcela del término municipal de Teguise, y la pintada fue subida por la propia autora a sus redes sociales. Suponemos que creía que lo suyo había sido una aportación al lugar.

Durante la mañana de ayer lunes, Vanessa Alice visitó el Cabildo de Lanzarote y mantuvo una reunión con el presidente Oswaldo Betancort, tras éste manifestar en sus cuentas de Instagram y Facebook su total oposición a la intervención artística ejecutada sobre un bien patrimonial. “El arte sí tiene cabida en nuestra isla, pero integrándose y respetando el patrimonio y la cultura insular”, manifestó Oswaldo Betancort, quien emplazó a la artista “a restablecer la fachada del inmueble que posee valores patrimoniales indiscutibles”.

Identificación y denuncia

Tras este encuentro, el Servicio de Patrimonio procedió, en primer lugar, a identificarse y, posteriormente, contrastar si contaba con autorización para realizar tal acción, ante lo que respondió que no y que tampoco conocía a los dueños.

“Ante esta situación, se le informó de que los los hechos podrían ser constitutivos de una infracción de carácter leve, por lo que se le solicitó los datos personales a fin de proceder a notificarle la correspondiente denuncia, accediendo Vanessa Alice, de origen francés y residente en Barcelona, a tal petición”, explican desde el Cabildo.

La acción descrita, a juicio de la Inspección Insular, “supone una agresión visual al inmueble, distorsionando considerablemente el aspecto y estética de este tipo de edificaciones, más cuando se trata de uno de los pocos ejemplos que todavía se conserva de este tipo de inmueble que resuelve su fachada con un frontis tapiado con muro biselado”, argumentan.

Por todo ello, la Inspección Insular, área que coordina la consejera Ascensión Toledo, considera que “los hechos descritos han generado un daño visual al inmueble de carácter leve, por lo que podrían ser objeto de una infracción de carácter leve, con multa de hasta tres mil euros”, amenaza.

Esto no es defender el patrimonio

Por último, señalar que este caso, para muchos lectores de www.elchaplon.com se ha convertido en una historia populista que intenta hablar de la defensa del patrimonio por parte de los responsables políticos lanzaroteños, cuando han sido innumerables las pérdidas del mismo sufridas en las últimas décadas por la inacción de las instituciones.

Es más que probable que esta vivienda en ruinas acabe como los miles de metros cuadrados de tuneras que han desaparecido a pocos kilómetros de allí, en un paisaje en Guatiza y Mala, durante décadas patrimonio visual de Lanzarote, y que ha muerto a pocos metros del Centro de Interpretación de la Cochinilla creado para alimentarlo y del que pocos se acuerdan ya. Eso en cuanto al paisaje conejero; porque hablar de la arquitectura tradicional y su estado de conservación y rehabilitación sería un capítulo aparte.