Continúa la lucha contra la plaga del picudín de las palmeras
El Cabildo de Lanzarote ha convocado una nueva jornada técnica sobre la gestión y conservación del palmeral insular, que se celebrará el próximo 17 de julio en su salón de actos. Esta iniciativa se enmarca en el Proyecto Palmeras Lanzarote, un plan estratégico desarrollado en coordinación con la Consejería de Transición Ecológica del Gobierno de Canarias, cuyo objetivo es combatir la plaga del escarabajo Diocalandra frumenti.
Esta especie invasora ha sido identificada como una de las amenazas más graves para el ecosistema palmero de Canarias. Desde su detección en las islas en 1988, se ha expandido de forma considerable, afectando especialmente a Lanzarote y La Graciosa. Su actividad perfora raíces, hojas e inflorescencias, debilitando las palmeras hasta comprometer su estabilidad estructural.
El Plan de control y erradicación ha estado operativo desde 2024 en ambos territorios, y ha permitido el censo y tratamiento de miles de ejemplares gracias a un equipo técnico distribuido por todos los municipios. Uno de los métodos más eficaces ha sido la aplicación de endoterapia, una técnica que permite introducir directamente en el tronco productos fitosanitarios que combaten la plaga sin dañar el entorno.
Además de los tratamientos directos, el plan ha incluido monitoreos periódicos mediante trampas, tareas de prevención, campañas informativas para la ciudadanía y formación técnica especializada.
Un proyecto con vocación insular
La jornada del próximo 17 de julio reunirá a especialistas, técnicos municipales, profesionales del sector y responsables institucionales para compartir avances, técnicas y buenas prácticas en la protección del palmeral. El consejero de Medio Ambiente del Cabildo, Samuel Martín, ha destacado que esta cita “será clave para seguir tejiendo alianzas y actuar con eficacia”.
Por su parte, el presidente del Cabildo, Oswaldo Betancort, ha valorado el plan como “una muestra de responsabilidad hacia el patrimonio natural de Lanzarote”, subrayando la importancia de proteger las palmeras, no solo por su valor ambiental, sino también como parte del paisaje y la identidad de la isla.
El Proyecto Palmeras Lanzarote, que cuenta con un presupuesto de 2 millones de euros, se ha desarrollado como una colaboración entre el Cabildo, el Gobierno de Canarias, GMR Canarias y el Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA). Su objetivo es actuar en zonas urbanas y rurales, protegiendo el palmeral tanto ornamental como silvestre.
La presencia de Diocalandra frumenti ha obligado a las instituciones insulares a poner en marcha una estrategia integral, basada en la acción coordinada y en el uso de métodos respetuosos con el medio ambiente. El monitoreo continuo y la respuesta rápida ante la detección de ejemplares afectados han sido fundamentales para frenar el avance de la plaga.