La teleasistencia del SUC salvó la vida a un hombre en parada cardiorrespiratoria
La rápida actuación de un recepcionista, guiado por la teleasistencia de un enfermero coordinador del Servicio de Urgencias Canario (SUC), fue decisiva para salvar la vida de un hombre de 60 años que sufrió una parada cardiorrespiratoria en un complejo turístico del municipio de Tinajo. Así lo informa hoy el 1-1-2, haciendo balance de una rápida intervención de los servicios de emergencia que evitó el pasado mes una tragedia en el complejo turístico de Club La Santa, situada en la Avenida Krogager, en el municipio de Tinajo.

El suceso se produjo a las 07:23 horas del día 20 de agosto, cuando el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (CECOES) 1-1-2 recibió una llamada alertando de que un varón se encontraba en parada cardiorrespiratoria tras ser sacado del agua.
La llamada de emergencia, recibida en el 112 Canarias, permitió que el profesional sanitario diera instrucciones precisas para iniciar maniobras de reanimación cardiopulmonar básica hasta la llegada de los recursos. De manera simultánea, la Policía Local trasladó al recinto un Desfibrilador Externo Semiautomático (DESA), con el que se aplicaron varias descargas que ayudaron a revertir la parada.
Posteriormente, una ambulancia medicalizada y otra de soporte vital básico del SUC estabilizaron al paciente, que fue trasladado en estado crítico al Hospital Doctor José Molina Orosa de Arrecife, donde permanece ingresado, estable dentro de la gravedad.
El enfermero coordinador Alexandre Hernández destacó “la importancia de la calma y rapidez del primer interviniente, ya que en una parada cada minuto cuenta para la supervivencia y para evitar secuelas graves”. Asimismo, subrayó el papel fundamental de la teleasistencia en la cadena de supervivencia.
Los DESA, presentes en espacios públicos y entidades locales, son claves para restablecer el ritmo cardiaco en este tipo de emergencias. En este caso, la coordinación entre 112, Policía Local y SUC demuestra que la reacción inmediata de los primeros intervinientes es decisiva para salvar vidas en Lanzarote.