El Cabildo lanzaroteño idea unas ayudas agrícolas contra el clima adverso
El Cabildo de Lanzarote trabaja en la creación de una línea de ayudas económicas dirigida a agricultores y agricultoras de la isla y de La Graciosa con el fin de paliar las consecuencias del cambio climático en el campo. La iniciativa, que estará operativa a partir del próximo ejercicio presupuestario, se enmarca dentro de la estrategia insular de respaldo al sector primario.
El anuncio fue realizado este lunes, 8 de septiembre, por el presidente de la Corporación, Oswaldo Betancort, quien señaló que el Cabildo es consciente de la situación que atraviesan los productores debido a la falta de lluvias, las altas temperaturas y otros fenómenos meteorológicos adversos. Estas circunstancias, cada vez más frecuentes, han repercutido directamente en la viabilidad de los cultivos, considerados fundamentales para la identidad y el paisaje insular.
Actualmente, el Área de Agricultura y Ganadería trabaja en la definición técnica y legal de estas subvenciones. El objetivo es ofrecer un respaldo económico que ayude a compensar las pérdidas anuales ocasionadas por las condiciones meteorológicas extremas. La medida responde a la creciente demanda del sector, que ha trasladado al Servicio Insular Agrario su preocupación por los descensos de producción registrados en distintas explotaciones.
La campaña vitivinícola de este año es una de las más afectadas, con una merma notable en la recogida de uva. También se han visto perjudicados otros cultivos como la sandía, el tomate, la batata o la pitaya, cuya producción se ha reducido en las últimas semanas. Los agricultores han manifestado que el impacto de la meteorología en sus cosechas dificulta el sostenimiento de sus explotaciones y pone en riesgo su continuidad.
El Cabildo pretende que la nueva línea de ayudas se convierta en un instrumento estable dentro de las políticas de apoyo al sector primario. Según explicó la institución, la previsión es que se integre en los presupuestos del próximo año, permitiendo atender las solicitudes de quienes demuestren pérdidas derivadas de fenómenos climáticos adversos.
