Somos Lanzarote exige la apertura de la «planta fantasma» del Hospital
Somos Lanzarote se ha sumado a la denuncia realizada por el sindicato de trabajadoras y trabajadores del Hospital José Molina Orosa reclamando que se abra «cuanto antes» la planta que actualmente la Gerencia mantiene cerrada en el centro hospitalario.
A través de su secretario de organización, Borja Rubio, han acusado al Director Insular de Sanidad, Erasmo García, así como al Consejero de Sanidad de Coalición Canaria, José Manuel Baltar, de «incumplir con los plazos» dados para la apertura y exigen «que se den explicaciones por la dilación» en la puesta en marcha de esta parte del Centro que algunos de sus trabajadores denominan «planta fantasma».
Desde la organización insular entienden imprescindible la “disposición inmediata” de esas 40 camas «para aliviar la carga asistencial esperada en los próximos meses, en los que, según los propios trabajadores del hospital, se prevén más ingresos por el inicio de la temporada de gripes».
Asimismo, recuerdan que ambos responsables fueron recientemente reprobados por el pleno del Ayuntamiento de Arrecife a petición de Somos Lanzarote por «sus incumplimientos sistemáticos en cuestiones tan importantes como el búnker de radioterapia, primero negando su necesidad, posteriormente argumentando su elevado coste y ahora incumpliendo los plazos”.
Somos Lanzarote considera “improrrogable” la solución de «la larga lista de déficits en materia sanitaria que soporta la isla», según este edil de la oposición en Arrecife. “Lanzarote cuenta con los peores ratios de Canarias respecto a la atención sanitaria urgente, siendo el Hospital Dr. Molina el que mayor presión sanitaria recibe a través de su servicio de urgencias y teniendo carencias en servicios básicos como la unidad de radioterapia o la unidad de hemodinámica, unida a la subida de listas de espera quirúrgica y se une a otras deficiencias como los 400 euros menos de media que recibe cada lanzaroteño por tarjeta sanitaria. Aunque resulte duro, la ausencia de estos servicios hace que una persona residente en Lanzarote tenga menos posibilidades de curarse de una enfermedad grave que otra que reside en Gran Canaria o Tenerife”, ha señalado Borja Rubio.
“Esta grave discriminación que sufre el sistema sanitario lanzaroteño tiene el sello de la política sangrante Coalición Canaria. Es inaplazable descongestionar esta saturación y sólo puede hacerse a través de la dotación de recursos”, concluía en su crítica política el secretario de organización de Somos Lanzarote.