Las unidades de rescate confían en no encontrar nuevas víctimas mortales
Aunque continuarán hasta el anochecer de este viernes, es muy probable que los equipos de rescate lanzaroteños no continúen mañana sábado la búsqueda en aguas norteñas de nuevas víctimas del naufragio de la embarcación de inmigrantes subsaharianos ocurrido en la noche del jueves en Órzola (Haría). Sí que se prevé una búsqueda pasiva, advirtiendo a los efectivos de emergencias habituales en la zona.
Tras las pesquisas de las últimas horas, fuentes de los cuerpos de Seguridad -Policía Nacional y Guardia Civil- han señalado como poco probable que haya más personas desaparecidas, situando finalmente en 45 la cifra de migrantes que viajaban en la lancha neumática cuando volcó.
Fueron rescatados 41 ciudadanos, mientras que otras cuatro personas perdían la vida; dos mujeres (una de ellas embarazada), un varón y un menor de edad. Precisamente el cuerpo de este pequeño fue localizado hoy viernes en aguas próximas. Las tres primeras muertes se confirmaban en las primeras horas del naufragio.
Hay que recordar que los rescatadores y algunos vecinos de la localidad protagonizaron durante más de dos horas la recuperación de los navegantes que viajaban a bordo de la lancha que encalló a pocos metros de la costa.
Un día de búsqueda
La previsión es que los rescatadores sigan en la zona hasta el anochecer de hoy, después de que a primera hora de esta mañana retomaran la búsqueda por aire, mar y tierra. Calculaban entonces que en la embarcación viajaban 46 personas, por los testimonios de los recién llegados. Por ello, han buscado a dos desaparecidos: a un menor de edad, que ya ha sido localizado este viernes; y a un adulto varón. Sin embargo, las investigaciones policiales de las horas siguientes situaron en 45 la cifra más probable de viajeros, con lo que la búsqueda mañana sábado se mantendrá de manera pasiva, como se ha referido.
El cuerpo de la cuarta y última víctima mortal, un pequeño de unos ocho años de edad, era divisado en el mar por el helicóptero del GES este mediodía, y recuperado por los bomberos del Consorcio de Seguridad lanzaroteño.
