La ULL hace entrega a título póstumo de su Medalla de Honor a César Manrique

Hoy se producía el acto de entrega de la Medalla de Honor de la Universidad de La Laguna (ULL), máxima distinción de la Institución, al artista y activista medioambiental César Manrique (1919-1992).

Se trata de la máxima condecoración honorífica concedida por el centro, que hasta la fecha solamente había sido otorgada a Su Majestad La Reina de España, en 1991, y al jurista Francisco Tomás y Valiente, en 1996. La de hoy ha sido recogida por José Juan Ramírez, presidente de la Fundación que lleva el nombre del artista, coincidiendo con el centenario del nacimiento de una personalidad a quien la rectora Rosa Aguilar calificó como “visionaria” e “inspiradora”, en su discurso de entrega de la medalla. La ceremonia tuvo lugar esta mañana, a partir de las 12:00 horas, en el Paraninfo.

En el acto de entrega estuvo la presidenta del Cabildo de Lanzarote, María Dolores Corujo, quien subrayó el “honor que supone para el Cabildo de Lanzarote acompañar en este acto a la Fundación César Manrique, que es la depositaria de la obra y el legado del artista” y remarcó lo especial que resulta la entrega de este reconocimiento póstumo, «que solo se ha entregado en dos ocasiones y que ahora recae en uno de los grandes hijos de Lanzarote y en la figura más relevante de nuestra historia contemporánea”.

“A pesar del tiempo transcurrido, sigue estando entre nosotros porque somos muchísimas las personas en Lanzarote y en Canarias que mantenemos vivo su compromiso en defensa de la arquitectura tradicional, el territorio, la naturaleza o el medio ambiente”, destacó la presidenta.

Arte y naturaleza

Esta distinción es una seña de la huella que Manrique dejó y del recuerdo de cómo “criticó y combatió la especulación urbanística, la masificación turística o la pérdida de personalidad de las Islas. Todas reconocemos al pintor y al escultor, tenemos presentes sus propuestas de relación armónica entre el arte y la naturaleza, y seguimos sus enseñanzas para aprender a ver la belleza de cualquier paisaje”, apuntó.

Corujo subrayó también la importancia del legado del artista en los Centros de Arte, Cultura y Turismo del Cabildo de Lanzarote, cuyos espacios son un ejemplo de la conservación del patrimonio histórico, artístico, cultural y natural de la Isla y que se han convertido en estos años en un motor económico y sociocultural de Lanzarote.

Por su parte, José Juan Ramírez, presidente de la Fundación César Manrique, recordó en su intervención la figura vitalista y alegre de Manrique, así como su creencia en el arte como instrumento para la mejora social y en que la naturaleza tanto de Canarias como de todo el mundo supone “un patrimonio fundamental para la humanidad y para la supervivencia de la especie humana, hoy amenazada por el cambio climático y, de fondo, violentada por un sistema económico abusivo e insensible que produce desigualdad e injusticia, deteriora los recursos naturales y pone en riesgo la vida en la Tierra”. 

La concesión de esta condecoración a César Manrique fue aprobada unánimemente por el Consejo de Gobierno de la institución académica el 25 de septiembre de 2019, pero la ceremonia de entrega de la medalla ha tenido que posponerse hasta esta ocasión a causa de las medidas de control de aforo derivadas de la pandemia.

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