La Ciudad Histórica de Yaiza cierra el programa de actos que conmemoran su título

El municipio de Yaiza clausuró ayer sábado por todo lo alto el programa conmemorativo de la obtención del título de Ciudad Histórica, con un acto concurrido, emotivo y especialmente señalado por el estreno de la obra escénica Yaiza Ciudad Histórica, dirigida por Salvador Leal.

Se representaron allí los hechos relevantes del pasado yaicero, exaltando valores patrimoniales del pueblo sureño a través de una propuesta interpretada por cerca de treinta actores y grupos de danza del municipio que puso en pie el patio de butacas con ovación incluida.

El alcalde, Óscar Noda, aseguró en su discurso que “todos los reconocimientos a personas y entidades entregados en el programa Yaiza Ciudad Histórica son parte de nuestra historia, y la historia tiene el defecto de sobrevivir a sus protagonistas, así que cuando nosotros no estemos en el mundo de los vivos, alguien nos recordará por haber devuelto a Yaiza el título de Ciudad, una efeméride que será celebrada por las generaciones venideras, y que debemos saborear con orgullo, porque todos nosotros hemos estado aquí para poder contarlo”.

Nueva imagen institucional

La distinción abarca a todo el municipio, que pasa a denominarse Ciudad Histórica de Yaiza, anexando a su escudo una cinta de plata con la leyenda del título.

Este hecho supone el cambio de la imagen institucional, y por tanto, el alcalde y todos los concejales del Ayuntamiento son poseedores de la nueva medalla corporativa que fue entregada tras la representación escénica.

El público reunido en la Plaza de la Alameda pudo ver con lujo de detalles el nuevo escudo heráldico gracias al buen hacer del trabajador municipal Pancho Ortiz que lo elaboró en sal con la colaboración de Salinas de Janubio.

Obra espectacular

El silencio y la oscuridad dan paso a una potente representación dramática, rica en interpretación, movimiento, vestuario, atrezo, música e iluminación, guiada por dos narradores y la dulzura de un violín en escena, que impulsan la narración de los hechos con sutiles transiciones.

La obra Yaiza Ciudad Histórica escenifica tres actos sin parar, con ausencia de diálogos. De la referencia de la conquista franconormanda en el Rubicón, pasa a los ataques de piratas sorprendiendo con la irrupción de un barco que sale de la nada para llegar a tierra y consumar el asalto, mientras campesinos y campesinas corren huyendo despavoridos de la barbarie.

Llegan entonces momentos cotidianos. Mujeres y hombres en duras tareas de labranza, dividiéndose el trabajo; pero todo no puede ser trabajo, así que también hay tiempo para comer, beber, hablar, reír, y por supuesto, para enamorarse.

El rugido de un volcán acaba con la tranquilidad. Los efectos de sonido, la música y la pirotecnia ponen al público en alerta viendo hacia una montaña, que hace de fondo de escenario. La aldea queda arrasada y la desazón envuelve el ambiente. Ante el destrozo y la desesperanza no queda otro camino que emigrar, sí, la triste despedida llena de maletas, consejos, abrazos y besos, sin tener la certeza del retorno.

Sin embargo, el pueblo es fuerte y regresa el movimiento. Aparecen varios personajes, algunos de ellos sentados en una tarima rodante, mientras un individuo intenta repartir tareas. Salen hombres y mujeres portando enormes banderas con los colores de la bandera institucional de Yaiza, amarillo, azul, rojo y blanco, formando un semicírculo para que aparezcan entonces más personajes con cuadros de madera como fiel copia de cada uno de los cuarteles del escudo heráldico, el Volcán, es uno de ellos, otro la Llave y el Bastón, otro el Castillo de Las Coloradas, para luego completar el puzle del escudo colocando su Corona, y terminar, cómo no, con la cinta plateada donde se puede leer Ciudad Histórica, “título desde antaño merecido”, nos recuerda un narrador.

El acto de clausura del programa Yaiza Ciudad Histórica finalizó con un estupendo repertorio musical del Grupo Bohemia Lanzarote dirigido por Juanma Padrón.