La Asociación Kellys Lanzarote justifica la huelga pero no se involucrará

Tras haber mantenido esta semana un asamblea informativa en Playa Blanca, sobre la convocatoria de huelga de camareras de piso en las Islas realizada por un único sindicato, la Asociación Las Kellys de Lanzarote ha variado su postura inicial y aclaraban hoy miércoles que ellas pertenecen a “un movimiento transversal, autónomo y totalmente independiente, que no pertenece a ningún sindicato ni partido político”.

Advierten en un comunicado de que, a pesar de que no están de acuerdo “con la forma con la que se ha organizado la huelga” para los próximos días 25 de diciembre y 1 de enero por parte del sindicato convocante; sin embargo, seguirán “apoyando», dicen, todas las iniciativas que contemplen «mejoras laborales para todas las trabajadoras, y en especial para nuestro de gremio, convoque quien convoque.

Pero, la Asociación en Lanzarote se desmarca de participar al advertir que entienden que las camareras de piso de la cadena H10 en Tenerife “necesitan medidas urgentes que reduzcan la carga de trabajo que llevan actualmente, al igual que muchas otras compañeras de la cadena en la provincia de Las Palmas. Las apoyamos y seguiremos haciéndolo, pero entendemos también que no podemos involucrar a toda una provincia en un conflicto especifico de una cadena hotelera en concreto, sin un trabajo previo y de fondo, que ha faltado en esta ocasión en concreto”.

Y continúan: “Por otro lado, nos consta que en uno de los hoteles de la misma cadena en Lanzarote, tras un duro y largo trabajo del comité de empresa (practicamente independiente), del que forma parte una de nuestras portavoces, ha llegado a un acuerdo donde la carga de trabajo es adecuada: 3 habitaciones de cliente por hora y 60 minutos por salida”, explican.

Imagen de archivo.

Y concluyen: “Por lo tanto, animamos a todas las camareras de piso a intentar llegar a acuerdos con la empresa para que se regule la carga de trabajo. Mientras tanto, apostamos por un comité de huelga con todos los sindicatos y asociaciones para preparar con tiempo una huelga general, consensuada y con una participación masiva, una huelga que involucre a las trabajadoras y que éstas y éstos sean conscientes de la situación actual en la que nos encontramos”.

La postura del colectivo lanzaroteño supone un cambio de actitud con respecto a sus primeras reacciones con respecto a esta convocatoria, cuando apuntaban que los sindicatos mayoritarios dilataban en exceso las medidas de presión y advertían que su salud no podía esperar tanto.