El Consejo Regulador estima que son competitivos también con los rosados
El consumo mundial de vino rosado se ha disparado en los últimos años. El Consejo Regulador de la Denominación de Origen de los Vinos de Lanzarote lo conoce y reconocía esta semana que “las bodegas de la Isla parten de una posición privilegiada” en la batalla por hacerse un hueco en la comercialización de caldos rosados.
Se refiere el Consejo al crecimiento de mercado y calidad en Lanzarote de los vinos rosados, “que pelean por quitarse de encima el sambenito del vino clarete que durante años se utilizó de manera despectiva en España”.
Y lo hace en el marco de los datos facilitados por la Organización Internacional del Vino, que está preparando un estudio sectorial sobre vinos rosados, debido a la importancia creciente de este tipo de vino.
Según los resultados preliminares, en 2014 la producción mundial de los rosados (excluyendo los espumosos) se estima en 24,3 M hl, lo que representa el 9,6 % de la producción mundial de vinos.
En cambio, el consumo mundial alcanzó ese mismo año los 22,7 M hl (+20% desde 2002), por lo que los vinos rosados han pasado de suponer el 17% del total de vinos no espumosos consumidos en 2002, y pasó al 30% en el ejercicio 2014.
La mejora de tintos y rosados
Los rosados elaborados por las 13 bodegas adscritas a la Denominación de Origen lanzaroteña suelen ser vinos de color rosa-grosella, frescos, afrutados y persistentes. La mayoría se elabora con la variedad Listán negro, la uva negra más extendida en la isla.
Y es la uva Listán negro también la mayoritaria en la elaboración de los vinos tintos de Lanzarote. Las peculiaridades de la uva, del clima y del terroir de Lanzarote han venido condicionando durante años el carácter de los vinos tintos, y reconocen desde el Consejo que han estado “eclipsados por la calidad de los blancos”.
Sin embargo, puntualizan que “en los últimos tiempos, el esfuerzo de las bodegas en investigación de los procesos vinícolas y el uso de otras variedades de uva negra, como la Syrah, han derivado en un salto en la calidad de los tintos que estamos convencidos seguirá aumentando”, concluyen.
