Detenidos tras aparecer tres angelotes muertos en una red fantasma en Haría
La costa de Punta Mujeres, en el municipio de Haría, ha vuelto a poner de manifiesto la fragilidad de los ecosistemas marinos de Lanzarote y la importancia de la vigilancia y la colaboración ciudadana. El SEPRONA de la Guardia Civil ha intervenido una red de pesca ilegal en la zona, en cuyo interior se encontraban tres ejemplares de tiburón angelote, una especie catalogada en peligro de extinción. Dos personas han sido detenidas como presuntas responsables de los hechos.
La actuación se produjo tras el aviso de un vecino, que alertó de la presencia de un arte de pesca aparentemente abandonado cerca del muelle de Punta Mujeres. Los agentes del SEPRONA comprobaron que se trataba de un trasmallo de unos 80 metros, colocado en una zona de gran sensibilidad ambiental, lo que hizo sospechar que pudiera tratarse de una peligrosa “red fantasma”.
Durante la inspección se confirmó el peor escenario: la red había atrapado tres angelotes (Squatina squatina), de los cuales dos ya habían fallecido. Debido a las complicadas condiciones del mar y a la ubicación del arte, fue necesaria la intervención conjunta de bomberos del Consorcio de Seguridad y Emergencias, personal de la Reserva Marina de La Graciosa y los Islotes del Norte de Lanzarote, así como del Servicio de Inspección Pesquera del Gobierno de Canarias y del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), para retirar la red de forma segura.
Paralelamente, el SEPRONA inició una investigación que permitió identificar y detener a dos varones, acusados de un delito contra la fauna, tipificado en el artículo 334.1 del Código Penal, por la captura de una especie estrictamente protegida desde 2019.
El tiburón angelote, uno de los símbolos de la biodiversidad marina canaria, ha sufrido un drástico descenso poblacional en las últimas décadas debido a la pesca accidental y a la degradación de su hábitat. Canarias es actualmente uno de los últimos refugios importantes de esta especie a nivel mundial, lo que convierte cada captura ilegal en un golpe directo a su supervivencia.
Desde la Guardia Civil, el Gobierno de Canarias y el MAPA se ha subrayado que este tipo de actuaciones reafirman el compromiso institucional con la protección del medio marino, la conservación de las especies amenazadas y la sostenibilidad de los recursos pesqueros. Asimismo, se ha agradecido de forma expresa la colaboración ciudadana, clave para detectar y frenar actividades ilícitas en el litoral.
La Reserva Marina de La Graciosa y los Islotes del Norte de Lanzarote, creada en 1995 y con más de 70.700 hectáreas protegidas, es uno de los espacios marinos más valiosos del archipiélago. Sus fondos rocosos, cuevas, praderas de sebadales y la riqueza de especies convierten este entorno en un auténtico tesoro natural que requiere una vigilancia constante para garantizar su conservación.
Lo ocurrido en Punta Mujeres es un recordatorio claro: proteger el mar de Lanzarote es una responsabilidad compartida. Cada aviso cuenta, y cada acción ilegal tiene consecuencias.






