El PSOE acusa al Cabildo de un gasto de 110.000€ en viajes y dietas en 2024
El PSOE acusa al presidente Oswaldo Betancort de convertir los desplazamientos oficiales en un gasto excesivo y sin justificación clara, dicen. Solo en dietas, hoteles y vuelos, el Cabildo ha destinado más de 110.000 euros desde enero, mientras persisten problemas sociales como el agua, la vivienda o la sanidad.
El gasto acumulado en viajes y dietas del actual grupo de gobierno del Cabildo de Lanzarote ha superado los 110.000 euros en un año, según ha denunciado este jueves el Partido Socialista. La portavoz del grupo en la corporación insular, Ariagona González, ha calificado la cifra como un “despilfarro sin precedentes” y ha cuestionado la gestión del presidente Oswaldo Betancort.
Según los datos facilitados por el grupo socialista, el desembolso público destinado a desplazamientos institucionales, tanto nacionales como internacionales, se disparó durante los primeros meses de 2024. Entre los destinos visitados por el presidente del Cabildo destacan ciudades como Nueva York o Texas, lo que ha llevado a la oposición a considerar que parte de esos viajes tienen una “finalidad propagandística más que institucional”.
“Mientras los vecinos de la isla sufren cortes de agua, listas de espera sanitarias y una emergencia habitacional sin precedentes, el presidente del Cabildo continúa aumentando el número de viajes oficiales a cargo del presupuesto insular”, ha afirmado González durante una comparecencia pública.
Además del gasto en viajes y dietas, desde el PSOE sostienen que el actual equipo de gobierno ha incrementado de forma notable el número de asesores, coordinadores generales y cargos de confianza con cargo al erario público. Según González, esto ha supuesto una “sobrecarga innecesaria” para las arcas del Cabildo, que ya arrastran tensiones presupuestarias en partidas esenciales como servicios sociales, infraestructuras o recursos hídricos, según la oposición.
La portavoz ha señalado que el gobierno insular “ha batido récords de gasto” y ha acusado a Betancort de “utilizar la institución como un cortijo personal, colocando afines políticos sin priorizar el interés general ni la eficiencia de la gestión pública”.