Podemos denuncia que Educación no reduce el horario lectivo a docentes

Manuel Marrero, portavoz del Grupo Parlamentario Podemos en el área de Educación, ha exigido a la consejera Soledad Monzón, «que cumpla la Ley de Presupuestos» aprobada hace un mes y “traslade a los equipos directivos de los centros de Secundaria la orden de que la propuesta de plantilla del próximo curso se haga de acuerdo con las dieciocho horas, tal como se acordó en el Parlamento”.

Marrero critica hoy en un comunicado que la Consejería de Educación haya remitido a los equipos directivos de los centros de Secundaria “la orden de confeccionar la propuesta de plantilla de profesorado del centro para el curso próximo sobre el criterio de las veinte horas lectivas en vez de volver a las 18 horas lectivas”.

“Ya advertimos a Monzón en sede parlamentaria que estaríamos muy vigilantes con el cumplimiento de la medida aprobada, porque las cuentas no nos cuadraban”, ha recordado el diputado de la formación morada.

En este sentido, insiste en que se necesita “incrementar la plantilla en unas 1350 personas y, sin embargo, sólo estaba previsto en los Presupuestos” un crecimiento en torno a 143 docentes, según el político de la formación magenta.

“Exigimos a la consejera de Educación el cumplimiento inmediato de la Ley de Presupuestos. Ya viene incumpliendo la Ley canaria de educación, en lo que se refiere a la financiación, dejándonos muy lejos del 5 por ciento comprometido para 2022, y no vamos a permitir un incumplimiento más”, insiste.

«Recuperar los derechos perdidos»

Al respecto, recuerda que el decreto aprobado en 2012 por el Gobierno que presidía Mariano Rajoy “quitó el dinero a Educación y Sanidad, para entregárselo a los bancos, y eso implicó que se dejaran de contratar a unos 1350 docentes” y, a la par, “hubo un aumento de la carga lectiva del profesorado en Secundaria, que pasó de 18 a 20 horas, más las de Permanencia, que pasó de 24 a 26 horas”.

Según Marrero, recuperar el horario lectivo previo a los recortes “no solo es una cuestión de recuperar los derechos perdidos del profesorado, pues lo que se logra, de manera especial, es tener una mayor calidad del trabajo de docencia que se imparte en las aulas”, lo que redunda en la formación del alumnado.

“Por supuesto, tampoco permitiremos, y la comunidad educativa tampoco, que la solución de la Consejería sea una nueva ocurrencia basada en incrementar las ratios para así solventar el problema de su ineficacia en la gestión”, ha concluido