Lanzarote abre el proceso para declarar la Isla como Zona Turística Saturada

La presidenta del Cabildo de Lanzarote, María Dolores Corujo, ha comparecido en rueda de prensa para dar cuenta de los acuerdos adoptados por el Consejo de Gobierno Insular en relación al Estudio de Capacidad de Carga Turística en Lanzarote, encargado por la Sociedad de Promoción Exterior a Gaia Consultores Insulares, SLU.

Corujo ha señalado que la principal conclusión del estudio es contundente pues advierte que “el análisis de los indicadores de capacidad de carga no deja margen de duda sobre la necesidad de declarar la isla de Lanzarote como Zona Turística Saturada”.

La responsable insular subrayó que esta herramienta, que tendrá su reflejo en el planeamiento insular, ya aparece en Ley del Suelo, y no se trata de un invento del PSOE, decía.

“No podemos vivir de espaldas a la realidad, Lanzarote necesita tomar medidas para reorientar su modelo turístico a lo largo del próximo mandato y para ello es imprescindible disponer de un diagnóstico riguroso y realista”, ha explicado la presidenta, señalando: “ya disponemos de los resultados de ese análisis y hemos adoptado los acuerdos que permitirán tomar ahora las medidas necesarias para impedir que nuestros límites continúen desbordándose”.

La presidenta ha explicado que, como consecuencia de haber tomado conocimiento del desbordamiento de la capacidad de carga insular, el Consejo de Gobierno ha acordado iniciar el procedimiento para la declaración de Lanzarote como Zona Turística Saturada y tomar en consideración el Estudio de Capacidad de Carga en los instrumentos de ordenación a tramitar por la corporación.

Finalmente, el Consejo acordó también encomendar la realización de los informes necesarios sobre las medidas a adoptar como consecuencia de haber constatado el total y absoluto desbordamiento de la capacidad de carga turística de la isla, en orden a la declaración de Lanzarote como zona turística saturada y la posibilidad de formalizar tal declaración de forma autónoma, con carácter previo a la revisión del Plan Insular.

Una herencia envenenada, decía

La presidenta explicó que analizar el proyecto de Plan Insular heredado de la anterior corporación fue una de las primeras tareas acometidas tras su toma de posesión, aunque luego estos trabajos se vieran demorados por los esfuerzos que exigió dar la respuesta adecuada a la crisis generada por la pandemia. “Comprobamos que el Plan que se estaba tramitando partía de una consideración que no compartíamos, pues planteaba que Lanzarote podía seguir creciendo a lo largo de los próximos años», ha explicado Corujo que destacó que, además «el Plan nacía muerto, porque no se adaptaba en absoluto a los cambios introducidos por la Ley del Suelo de 2017 pudiendo convertirse en una auténtica fuente de problemas por la inseguridad jurídica que generaría su aplicación”.

Sin embargo, no resultaba nada fácil dejar sin efecto los pasos que se habían ido dando en la etapa anterior, decía. “Nos dejaron una bomba de relojería en los cajones en forma de dictamen del secretario de la COTMAC en el que se indicaba que el documento tenía que continuar hasta la tramitación final”, ha explicado la presidenta. Debido a ello, “debimos dejar transcurrir el tiempo para que el plan decayera, por haber superado su tramitación los plazos señalados por las disposiciones transitorias de la Ley del Suelo”.

“Se trataba de una decisión arriesgada pero preferimos sufrir las críticas por nuestra supuesta inacción antes que seguir tramitando un instrumento que no resultaba conveniente en absoluto para Lanzarote”, ha reconocido Corujo.

El estudio de capacidad de carga

La presidenta explicó que, una vez archivado el anterior Plan, la prioridad estaba en disponer de un diagnóstico serio y riguroso, que permitiera acometer la redacción de un nuevo Plan Insular ajustado a la realidad preexistente.

“Comenzamos a trabajar internamente para comprobar que era cierta nuestra percepción sobre la saturación turística, fruto de haber desbordado la capacidad de carga insular y nos encontramos con que todos los datos que conocíamos reforzaban esa percepción”.

A raíz de esos trabajos previos, ha señalado la presidenta, “di instrucciones a la Sociedad de Promoción Exterior de Lanzarote para que contratara con una consultora de primer nivel la elaboración de un Estudio de Capacidad de Carga Turística en Lanzarote”.

“En dos décadas la población de Lanzarote ha crecido un 52%… Está claro que hay que replantearnos nuestro modelo turístico”.

Sobre las medidas a tomar a partir de ahora, la responsable del Cabildo y candidata del PSOE anotó que con este diagnóstico en la mano, su formación tiene ya ideadas las propuestas que lanzarán en unos días para ejecutarlas si continúan con responsabilidades de Gobierno. Afirmó que el Cabildo sí tiene competencias para limitar el alquiler vacacional; criticó a CC por haber facilitado que se duplicara el número de camas concedidas el pasado mandato al que será el mayor hotel de Canarias que se construye ahora en Playa Blanca; y subrayó algunos datos desbordados en las estadísticas lanzaroteñas durante las últimas dos décadas, como el consumo de agua, energía o la galopante densidad de turista por metro cuadrado, presión que no tiene nada que ver con Tenerife, Gran Canaria o Fuerteventura, decía.

Gaia Consultores Insulares, SLU

La consultora seleccionada para acometer esta importantísima tarea fue Gaia Consultores Insulares, por su acreditada experiencia y reconocida solvencia en este ámbito, han defendido hoy desde el Cabildo.

El equipo de Gaia viene avalado por haber elaborado el trabajo más exhaustivo que se ha realizado en las Islas sobre Capacidad de Carga Turística, han defendido hoy desde el Cabildo. En 2006, por encargo del Gobierno de Canarias, fue la autora de la “Metodología para la aplicación práctica de la apreciación y evaluación de los factores determinantes de la Capacidad de Carga, especialmente en zonas turísticas”.

“El informe señala que actualmente en Lanzarote la vivienda vacacional supone un tercio de la oferta alojativa insular”.

Se trata de un trabajo riguroso, plasmado en cinco volúmenes, que fijó el marco legal y metodológico para la determinación de la capacidad de carga turística de las islas.

“En conclusión, y me parece importante destacarlo, para la determinación de la capacidad de carga insular hemos recurrido al equipo de mayor solvencia técnica y con más experiencia de Canarias para garantizar la mayor cobertura a las decisiones que, como sociedad insular, debemos adoptar”, ha finalizado Corujo.