La UD Lanzarote no logró superar el muro del San Fernando, y empató
Choque de equipos muy competitivos el vivido en la Ciudad Deportiva entre el líder de Tercera, la UD Lanzarote, y el que podríamos catalogar como equipo revelación de la primera vuelta liguera, la UD San Fernando.
Los grancanarios llegaron al recinto lanzaroteño sin complejos, mientras que la UD Lanzarote lo hacía desde su condición de sólido líder al que, sin embargo, le está costando entrar en los partidos en las últimas semanas. En esto último, claro, tienen mucho que ver los rivales, que son conocedores de que se enfrentan al “difícil” primer clasificado, y despliegan pronto la presión.
Pero, poco a poco, la escuadra local se fue desperezando.
Empujó el San Fernando en el arranque, con un aviso del ariete Nacho Quirino, cuyo remate era enviado por el meta Agoney a corner.
Pero luego ambos rivales, muy parejos, se enredaron en el centro del campo y los aproximadamente 350 aficionados que acudieron a la cita dominical, lo cierto es que no vieron excesivas ocasiones de gol en esta primera mitad; más allá de un cabezazo elevado del lateral visitante Eslava, al lanzamiento de un saque de esquina; y un remate al lateral de la red protagonizado por el lanzaroteño Toñito en área “canariona”.
Más músculo en la segunda parte
Las entradas en liza en el inicio de la segunda de Vladi y Ángel Gil –que sustituyeron a Kennedy y Echedey- parecían buscar más salida “rojilla” desde atrás y sumar claridad a la creación de juego ante los problemas locales de la primera mitad.
Hoy las ideas no aparecían entre los lanzaroteños, que optaron por ponerse el mono de trabajo y esperar quizá a un contrapolpe que rompiera el difícil entramado defensivo de un rival que puede presumir de ser el que menos goles recibe en este grupo de Tercera (13, en 22 partidos).
Claro para adelantarse en el marcador lo tuvo la UD San Fernando en la ocasión de Yeray Sosa, una internada que cortando la defensa lanzaroteña (min. 64) terminó con un remate raso y una buena parada de Agoney bajo palos.
El tesón lanzaroteño, sin acierto en las transiciones hoy, continuó intacto hasta la recta final del choque, y fue precisamente la pelea lo que situó el escenario de peligro en el área del San Fernando en el último tercio del enfrentamiento. Un remate de Mauri a bocajarro -cuando corría el minuto 78- encontró respuesta en el meta Pablo, que rechazó con el pie.
Las ocasiones más claras del período llegaron al final. Una en los pies del interior visitante, Claudio, que se encontró en la frontal del área pequeña con un envío desde la banda y remató con pierna izquierda, para que el portero Agoney salvara los muebles y parara el balón, ya en los últimos instantes de partido.
Y dos para el bando local, casi consecutivas ya en tiempo de descuento: un disparo de Mauri, que culminaba una internada por la izquierda, a la que repelió el portero; y un cabezazo mordido de Rosmen al lanzamiento de un saque de esquina.
Al final, mucho pundonor en ambos rivales; ocasiones fruto del cansancio y ambos conjuntos vuelven a repetir en su enfrentamiento un empate (aunque esta vez sin goles), como en la primera vuelta, cuando igualaron a un tanto.
Cierran una semana movida
Llegaron la UD Lanzarote y la UD San Fernando a este evite tras una semana algo irregular; en el caso de los “rojillos” por su malestar ante la última crónica de agencias que calificaba al equipo de poco limpio en el juego desplegado ante el Villa de Santa Brígida, en la última jornada, algo desmentido de plano por los lanzaroteños.
Más complicada fue aún la semana para el conjunto de Maspalomas, que afrontó la dimisión de su entrenador Jesús Hernández (Suso), tras los problemas con la directiva originados por nuevas incorporaciones en la plantilla, unas entradas que el técnico, afirmó, no eran necesarias y exigían salidas que él no estimaba convenientes. En el banquillo del San Fernando se sienta ahora Maxi Cabrera.
